Si hemos tenido un accidente de tráfico son muchos los daños que podemos sufrir, desde físicos y psicológicos, muchos de los cuales nos pueden dejar secuelas de por vida, hasta materiales. Por ello, es cada día más aconsejable, que contemos con los servicios especializados de un un despacho de abogados de accidentes de tráfico, ya que sus profesionales, especializados en este campo, nos pueden asesorar y guiar durante el proceso y, ayudarnos a lograr la mejor compensación para nosotros.
Si hemos tenido un accidente de tráfico son muchos los daños que podemos sufrir, desde físicos y psicológicos, muchos de los cuales nos pueden dejar secuelas de por vida, hasta materiales. Por ello, es cada día más aconsejable, que contemos con los servicios especializados de un un despacho de abogados de accidentes de tráfico, ya que sus profesionales, especializados en este campo, nos pueden asesorar y guiar durante el proceso y, ayudarnos a lograr la mejor compensación para nosotros.
En este sentido, los abogados de accidentes de tráfico nos asesorarán sobre la procedencia de iniciar o no acciones judiciales, la viabilidad de interponer una denuncia, las posibilidades de reclamar una indemnización, así como de los procedimientos a seguir y los plazos a cumplir, lo cual nos hace que podamos negociar, desde una posición de igualdad, con las compañías de seguros y, en caso de ser necesario, plantear correctamente la reclamación judicial.
Es importante que tengamos en cuenta que existe unos plazos y procedimientos específicos para poder formular una reclamación judicial, por lo que es fundamental que nos asesoren bien, pues según sea el hecho, deberemos iniciar un procedimiento u otro, con plazos y exigencias diferentes.
En este sentido, existen dos procedimientos a la hora de interponer una reclamación. Por un lado, el procedimiento penal, con el que perseguimos la imposición de una sanción al responsable del delito. Y, por otro, el procedimiento civil, con el que reclamamos una indemnización para conseguir un resarcimiento de los daños y perjuicios ocasionados. Debe ser un abogado especializado el que nos aconseje el camino a seguir.
La mayoría de las pólizas de seguros contemplan opción de elegir nuestro propio abogado. Es una oportunidad que no debemos pasar por alto, ya que contar con un abogado especializado en accidentes de tráfico puede reportarnos muchas ventajas. La principal, es que contamos con un profesional que maneja la demanda con eficacia, por lo que se encargará de reunir las pruebas, obtener informes médicos, informes de la policía, rellenar los formularios y todo el trabajo de fondo, agilizando así el proceso y ayudándonos a conseguir la máxima cantidad de la reclamación.
Por tanto la diferencia entre ganar y perder el caso, entre conseguir una indemnización acorde con los daños causados o no, depende, en la mayoría de las ocasiones, de que contemos con el trabajo de un buen especialista, que sepa defender nuestros intereses y protegerlos.
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